El ministerio de Hacienda celebró un nuevo mes de superávit fiscal, que le permite cerrar el primer cuatrimestre con un saldo positivo de $10.846 millones, es decir, el 0,1% del PBI.

El resultado, sin embargo, comienza a ser cada vez más ajustado y amenaza la meta de "déficit cero" pactada con el FMI. En abril, la diferencia entre ingresos y gastos fue solamente de $499 millones, debido al crecimiento del 36,2% de los desembolsos públicos.

En total, alcanzaron los $279.929 millones, a partir de la suba del 100,8% en subsidios energéticos, 83,8% en Transporte, 40,6% en gasto operativo y 37,8% en prestaciones sociales, donde se destacó el pagó de la Asignación Universal por Hijo (102%) y las jubilaciones y pensiones (36,5%) que se ajustaron al alza con las nuevas actualizaciones trimestrales.

Por el contrario, las partidas que menos se incrementaron fueron las transferencias a las provincias (7,6%), los gastos de capital (8%), y las transferencias a universidades (27,3%), siempre en términos interanuales.

Por primera vez Dujovne reconoció que el déficit fiscal podría llegar al 0,5%

En cuanto a los ingresos, se registró un alza del 43,8% donde se destacaron los recursos tributarios -netos de la deducción por coparticipación a las provincias- que alcanzaron $245.964 millones y mostraron un crecimiento de 45,4% interanual.

Dentro de estos, sobresalieron los Derechos de Exportación (313,4%), el Impuesto a las Ganancias (52,6%), los Aportes y contribuciones a la seguridad social (42%), el Impuesto al Valor Agregado (30,1%) y el Impuesto a los créditos y débitos (29,5%).

Por su parte, el pago de intereses de la deuda se incrementó un 101% en este último mes, debido principalmente al impacto de la suba registrada en el tipo de cambio (114%) en los intereses denominados en moneda extranjera (aproximadamente 60% del total del mes). Esto provocó una suba del 52% del déficit financiero que totalizó $66.073 millones.

El problema es que más allá de los positivos indicadores de los primeros cuatro meses del año, los propios números de Hacienda anticipan un escenario complicado. Según esta cartera, para alcanzar el déficit cero los ingresos deberían estar creciendo a una distancia de 17 puntos porcentuales respecto a los gastos, es decir, más del doble de lo alcanzado en abril.

Es por eso que Dujovne ya comenzó a reconocer que podría recurrir a los "ajustadores" del FMI que permitirían gastos extraordinarios por hasta el 0,5% del PBI, sin incumplir con las metas establecidas.